Hasta ahora habíamos visto vino para gatos y a reputados cocineros anunciando comida para perros e incluso ideando un menú para ellos. Pero lo que no sabíamos que existía era una propuesta en sentido inverso: humanos comiendo alimento para mascotas.

¿El típico error con la lata sin etiquetar en la despensa? ¿Un momento de vagancia extrema para no bajar al súper? Nada de eso. Una campaña premeditada de una marca inglesa de comida para animales, tan segura de su calidad, que se la ha dado a probar a personas.

Es verdad que los protagonistas de este curioso experimento gastronómico no eran conscientes de que tras los bonitos platos que les servían había comida para perros. De hecho, la mayoría parece disfrutar con la cata y el sabor.

Los ingredientes de la comida para perros y gatos no deberían ser un misterio ni nada secreto o malo, así que no hay ningún problema en que lo coma una persona. Este es el mensaje que lanzan desde Freshpet, que ya jugó con esta idea en 2015 y ahora incluso ha organizado un banquete en el que se servirán espaguetis, empanada y fajitas elaborados con algunos de sus productos para mascotas.

Según explican desde la compañía, sus alimentos se elaboran con productos frescos, y de hecho, las comidas resultantes para mascotas también se tienen que conservar en frío. Y entre las recetas hay cosas tan sofisticadas como pollo casero con arándanos y vegetales.

¿Suficiente como para que resulte apetecible para una persona? Por lo visto, sí. Al menos los catadores engañados parecen muy entusiasmados con el sabor de los platos. La habilidad del chef a la hora de camuflar los ingredientes también es notable, aunque no sabemos si tanto como para que, como aseguran, a todo el mundo le entren ganas de robarle la comida a su perro tras ver este experimento.